Los planetas

Mercurio.-
Es Hermes, su padre fue Zeus y Maya, hija de Atlas, su madre. Mediador entre los dioses y entre éstos y los hombres. Más conocido por la estatua que lo representa como un joven gracioso y rápido de movimientos que lleva unas sandalias aladas en los pies y también en su gorro y en su varita mágica. Era el dios latino del comercio. Era el mensajero de Zeus. Fue considerado como un ladrón desde su nacimiento y un poema nos canta que desde la mañana de su nacimiento, a la llegada de la noche ya había robado los rebaños de Apolo y tenía sólo un día. Zeus hizo que se los devolviera, ganándose el perdón de Apolo al ofrecerle a éste la lira que había acabado de inventar utilizando un caparazón de tortuga.

Venus.-
Es Afrodita la diosa griega del amor sensual y de la belleza. Según algunas versiones era hija de Zeus y Dione. Según otros, nació de la sangre que cayó al mar cuando Crono mutiló a Urano. Fue esposa de Hefesto, aunque tuvo amores con otros dioses como Hermes o Ares, con quien engendró a Eros y con mortales como Anquises, de quien nació el héroe Eneas.

Tierra.-
Está representada por Gea, la personificación griega de la Tierra, primera realidad material del Cosmos y origen de las razas divinas.

Luna.-
Diosa romana asimilada a Diana (Artemisa). Era la hermana gemela de Apolo, hija de Zeus y Leto. Era la diosa cazadora de los dioses y comotal, ella era muy cuidadosa en proteger a los jóvenes; dondequiera que fuese. Sin embargo, dentro de una de esas contradicciones tan comunes en la mitología, ella evitó que la flota griega zarpase de Troya hasta que le hubiesen sacrificado en su honor a un joven.

Marte.-
Es Ares, hijo de Zeus y de Hera, era el dios de la guerra, llamado Marte por los latinos. Es famoso por los amores que mantuvo con Afrodita y por el engaño al que fue sometido por el esposo de ésta, Hefesto, cuando los sorprendió juntos. Según los escritos, los romanos querían más a Marte que lo que los Griegos querían a Ares. Para ellobástenos en un caso leer la Ilíada y en el otro la Eneida. Homero lo llama sanguinario, cruel, encarnación blasfema de los mortales; y extrañamente un cobarde que se regocija con el dolor y que huye cuando es herido. Aparece poco dentro de la mitología y no tenía ciudades que le rindieran culto. Los griegos decían vagamente que provenía de Tracia, casa de los rudos y encarnizados del noreste de Grecia.

Júpiter.-
Esta representado por Zeus, la divinidad suprema, dios de la luz, de la naturaleza en todas sus manifestaciones de poder y del cielo. Su función es garantizar el orden del Cosmos y proteger al resto de los dioses.

Saturno.-
Era el más importante de los Titanes, hijo del cielo y la tierra. El reinó por encima de los demás Titanes, hasta que llegó su hijo Zeus y lo destronó ascendiendo él al trono, con lo cual Saturno huyó a Italia e introdujo la edad de oro, un tiempo de perfecta paz y felicidad, que duró todo el tiempo que reinó.

Urano.-
Es la personificación del cielo, hijo de Gea, quien lo engendró sin la participación de un principio masculino. Desempeña un papel importante en la teogonía de Hesíodo y en el orfismo. En otras versiones es el esposo de Gea y de ellos nacieron los Titanes, quienes eran los dioses mayores y de ellos el más importante era Cronos (en latín Saturno). Urano es el tercero en tamaño y fue descubierto por Herschel en 1781.

Neptuno.-
Es el dios itálico del agua, asimilado al Poseidón del panteón griego. Era el dios de los mares y hermano de Zeus, segundo en fama. Su esposa era Anfitrita una nieta del Océano (uno de los Titanes). Tenía un magnífico palacio en el fondo del mar, pero generalmente se le encontraba en el Olimpo. Fue el que le dio el primer caballo al hombre y por ello era venerado. Se le conocía como el “agitador de la tierra” (en los mares) y siempre era representado llevando su tridente con el cual podía sacudir y hacer añicos todo lo que le viniese en gana.

Plutón.-
Es el Rey de los infiernos y dios de los muertos. Es la morada subterránea de las almas de los muertos según los griegos.